Los colores (Feng shui).

Importancia de los colores en el Feng shui.

Más allá de su efecto visual o estético, los colores poseen cargas energéticas que influyen directamente en nuestro estado de ánimo.

Los colores que elegimos al vestir, en la decoración del hogar u oficina, revelan mucho de nuestra personalidad y sí sabemos emplearlos correctamente, pueden jugar a nuestro favor generando en cada entorno el efecto deseado. 


ROJO.
Tradicionalmente se asocia el color rojo con la violencia y la pasión porque genera demasiada energía; además ayuda en situaciones donde se requiere vigor, fuerza y valentía.
Estimula la actividad sexual, provoca un incremento en la actividad de las personas y es útil para superar periodos de depresión.
El color rojo es un buen estimulante del apetito, por lo que se recomienda en la decoración de restaurantes.
Es el color idóneo para cuestiones amorosas y si se combina con blanco refuerza la relación de pareja.

ROSA.
Salvo en el caso que se desee proyectar una imagen de ternura, el color rosa se debe evitar en cualquiera de sus tonalidades, porque posee la capacidad de bajar drásticamente los niveles de energía.
El uso del color rosa (en la decoración de habitaciones) sólo es recomendable cuando se tienen niños con hiperactividad.



MORADO.
Es el color de la serenidad, el misticismo, la transmutación, espiritualidad así como la reflexión, es ideal para decorar un estudio o algún espacio destinado a la meditación.
Este color representa todo lo relacionado con los estudios profesionales, la paz interior, el progreso, la autoridad y la ley.
Se recomiendan las velas de color morado para hacer peticiones porque simbolizan la prosperidad y la ambición.

ANARANJADO.
Es un color estimulante, pero en menor medida que el color rojo.
Se recomienda en la decoración para las fiestas ya que genera un ambiente agradable de optimismo y generosidad en los asistentes.
Incrementa la actividad deportiva y artística, además de reafirmar la parte creativa del ser humano e incrementar la capacidad de concentración.
Ayuda a mantener la armonía en las parejas de casados.


 AMARILLO.
Estimula la comunicación y la actividad intelectual, logrando que las personas sean más organizadas y extrovertidas, también fomenta la sinceridad y la armonía.
Este color que posee la cualidad de excitar el sistema nervioso y brindar una sensación de júbilo y alegría, es recomendable para la cocina de una casa o restaurante.
En la decoración de oficinas el color amarillo puede estimular la lógica, el sentido común y buenas negociaciones antes de cerrar un trato.
El Feng shui recomienda encender velas amarillas para hacer peticiones económicas, y que el dinero no falte en el hogar.
El amarillo es un color apropiado para el cuarto y la ropa de los bebés.

VERDE.
Es el color de la sanación, la esperanza y es ideal cuando se quiere mejorar la salud.
Promueve el desarrollo personal y profesional de quienes habitan una casa o trabajan en una oficina decorada con este color.
Provee energía (no tan intensa como la del color rojo), por lo que es muy apropiado para escuelas y hospitales.
También se asocia el color verde con los bienes materiales; las velas de este color son recomendables para atraer la suerte, obtener un buen empleo y tener negocios exitosos, ya que el verde está ligado a la abundancia en la naturaleza.


AZUL.
Es un color que promueve la introspección, serenidad y paciencia, además de proveer de paz interior.
Las velas de color azul son útiles para propiciar un acercamiento con el ser amado y estrechar los lazos afectivos con nuestros seres queridos.
El azul simboliza la unión entre las personas, el amor puro, los celos, la pasión y el olvido.
Es ideal para decorar la recamara de un niño hiperactivo para que pueda canalizar mejor su energía.


BLANCO.
Es el color que representa la espiritualidad, la pureza y la protección, se relaciona con la claridad, fe, limpieza, la verdad y la perfección.
Repele las energías negativas.
Las velas blancas se usan en las peticiones de protección para los integrantes de la familia, procurando la pureza y armonía en el hogar.

 
NEGRO.
El negro es la ausencia total de color, por lo que retiene mucha energía y simboliza el misterio, la sensualidad, lo desconocido.
Este color atrae al dinero y el poder.
Posee un efecto dual de potencializar las emociones, es decir, sí una persona que está triste viste de negro, incrementará su sufrimiento, por el contrario si una persona alegre utiliza este color incrementará su felicidad.