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SALUD, NUTRICIÓN & BELLEZA.


CUIDADOS DE LA PIEL.
Existen múltiples factores que dañan la piel de nuestro cuerpo como: la contaminación, los rayos UV, el uso prolongado de cosméticos, además de una mala alimentación y la falta de hidratación.


LA AMENAZA DE LOS RAYOS UV.
Para retrasar los efectos de foto-envejecimiento, prevenir el cáncer de piel, evitar manchas, pecas y cambios de pigmentación en la piel, es indispensable utilizar un bloqueador solar con factor de protección mayor a 50, además se recomienda no estar expuesto al sol por más de 30 minutos, especialmente en el horario entre las 11:00 y las 17:00 hrs. (cuando los rayos solares tienen mayor incidencia).
El factor de protección solar en un bloqueador, es un índice que indica el tiempo que una persona puede estar expuesta al sol sin sufrir quemaduras, es decir, los minutos que se puede estar expuesto a los rayos UV sin que sea necesaria una nueva aplicación de bloqueador solar.
En el caso de las pieles claras o sensibles es preferible el uso de bloqueador con pantalla solar.
La pantalla solar absorbe, refleja o disemina los rayos UV, ya que sus componentes químicos activos absorben la luz UV y evitan que ésta entre en contacto directo o impacte en la piel. Algunos ingredientes de las pantallas solares como el dióxido de titanio y el oxido de zinc, físicamente reflejan o diseminan la luz solar alejándola de la piel.
Estudios científicos han comprobado que el consumo frecuente de una sustancia llamada licopeno (que se encuentra en el jitomate), ayuda a reducir significativamente los daños que causan los rayos solares en la piel.



SALUDABLE POR DENTRO = BELLA POR FUERA.
Una alimentación balanceada y rica en nutrientes, aporta múltiples beneficios a la salud, mejora la apariencia de la piel, el cabello, y nuestro aspecto físico en general, además de que nos ayuda a mantener un peso adecuado, y altos niveles de energía. 
Es bien sabido que las frutas y verduras son una fuente importante de vitaminas, que los lácteos, la carne y el huevo nos aportan proteínas, y que los cereales contienen carbohidratos; sin embargo día con día se descubren nuevos componentes en la química de los alimentos que tienen efectos muy específicos en nuestro cuerpo.
A continuación te damos una lista de estos "aliados de la salud", y los alimentos donde podemos encontrarlos.
LICOPENO.
Es el pigmento vegetal responsable de dar su color rojo a los jitomates y las sandías.
Contiene una gran cantidad de antioxidantes que retrasan el envejecimiento celular, ayuda a disminuir el riesgo de padecer algunos tipos de cáncer como el de pulmón y próstata, disminuye los efectos dañinos de los rayos UV en la piel y previene el síndrome de degeneración macular (responsable de la mayor cantidad de casos de ceguera en personas de la tercera edad).

LUTEÍNA.
Es un compuesto químico que se encuentra en las espinacas y en ciertas algas.
Ninguna especie animal es capaz de producirla, por lo tanto se obtiene a través de los alimentos; una vez ingerida, la luteína se aloja en la mácula ocular por lo que tiene incidencia en la visión.
En pacientes con cataratas, el consumo frecuente de alimentos ricos en luteína ayuda a retrasar el avance de la enfermedad, y también se relaciona al consumo de luteína con la disminución en los casos de síndrome de degeneración macular.

OMEGA 3 Y 6.
Son ácidos grasos esenciales que se obtienen del salmón, el atúnmariscossemillas de lino y en las nueces.
Ayudan a prevenir enfermedades inmunológicas, cáncer de colon, padecimientos cardiovasculares y son fundamentales en el desarrollo del cerebro y la retina.
El consumo de alimentos ricos en ácidos grasos OMEGA 3 y 6 tiene un efecto regulador en los niveles de estrés.


Son sustancias que se encuentran en ciertos alimentos (uvasvino tintonueceschocolateaceite de olivacerveza) y que por su alta concentración de antioxidantes pueden reducir el riesgo de contraer enfermedades cardiovasculares, así como algunos tipos de cáncer.






CONSEJOS PARA BAJAR DE PESO.


Incluye mayor cantidad de frutas y verduras en tu dieta diaria. Ademas de ser la principal fuente alimenticia de vitaminas, minerales y otros tantos nutrientes, contienen la fibra necesaria para corregir problemas de metabolismo lento.


Practica algún deporte e incrementa tu actividad física diaria.
Una vida sedentaria es un pase directo al camino de la obesidad y las múltiples enfermedades que le acompañan, por eso ningún plan de pérdida de peso que pretenda ser efectivo puede estar excento de un aumento en la actividad física. No se trata de convertirse en un deportista de alto rendimiento sino de tratar de llevar una vida más activa.


Evita el ayuno prolongado.
En lugar de las 2 o 3 comidas fuertes acostumbradas, realiza 5 o 6 comidas ligeras por día, con intervalos de 3 a 4 horas entre ellas, y trata de incluir en todas fruta o verdura, con esto lograrás acelerar tu metabolismo, obtendrás altos niveles de energía durante el transcurso del día y por supuesto perderás peso.


Consume alimentos altos en fibra.
Cereales- Arroz, harinas y pastas integrales.
Verduras- Espinacas, brócoli, acelgas, lechuga, zanahoria, jitomate, calabazas, espárragos y berenjena.
Frutas- Principalmente aquellas que se comen con cáscara como: manzana, pera, durazno, ciruela, nectarina, higo, etc.




Toma 2 litros de agua al día.
De preferencia bebe un vaso con agua antes de cada comida, así obtendrás una sensación de saciedad con menos alimento.


Evita el estrés.
Las personas que viven bajo situaciones de estrés constante producen altos índices de una hormona llamada cortisol, que está directamente relacionada con el aumento de peso y los antojos de comidas con alto contenido calórico. 
Nadie está excento de tener que lidiar con situaciones de estrés, sin embargo podemos disminuir significativamente la manera en que nos afectan, con tan sólo un cambio de actitud.